Publicado: 24 de enero de 2024
Colaboradoras: Molly Hayes, Amanda Downie
La ingeniería de productos es una fase del desarrollo de productos en la que se aplican principios y prácticas de ingeniería a un ciclo de vida del producto. El proceso incluye diseño, desarrollo, pruebas y optimización.
La ingeniería de productos puede referirse a la ingeniería de software o al diseño de nuevos productos como electrónica, equipos industriales o automóviles. Independientemente del producto final, la ingeniería de productos implica un enfoque multidisciplinario. Esto puede suponer combinar aspectos de ingeniería mecánica, ingeniería eléctrica, ingeniería de software y otros campos relevantes para crear productos innovadores y de alta calidad.
La ingeniería de productos exitosa ofrece productos que no solo cumplen con los requisitos funcionales y técnicos, sino que proporcionan experiencias de usuario elevadas y complementan la estrategia empresarial global de una organización. A las organizaciones les suele resultar útil sistematizar el proceso de ingeniería de productos, trazando una hoja de ruta detallada y designando gestores de productos que garanticen un proceso oportuno y rentable. Esto ayudará a una organización a maximizar el valor de un producto para todo su ciclo de vida.
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Si bien la ingeniería de productos y el desarrollo de productos son términos estrechamente relacionados que en ocasiones se usan indistintamente, se refieren a procesos distintos. El proceso de desarrollo de un producto abarca la tarea completa y no técnica de crear un nuevo producto e implica actividades posteriores al lanzamiento, como el marketing y las ventas. La ingeniería de productos tiene un alcance más limitado. Por lo general, se centra en funciones de ingeniería como las especificaciones técnicas, los materiales, la fabricación y la integración de tecnologías o software. Si bien ambos procesos son cruciales para la creación y el lanzamiento exitosos de un nuevo producto, la ingeniería de productos es un subconjunto especializado del marco más amplio de desarrollo de productos.
El proceso de ingeniería de productos implica la colaboración entre varios equipos y partes interesadas para garantizar el éxito del desarrollo y la entrega del producto final. La composición de este equipo puede variar en función de la organización y la naturaleza del producto. Los miembros del equipo que suelen participar pueden ser:
Esto podría incluir ingenieros y desarrolladores de software, un equipo de control de calidad que realiza pruebas y validaciones, o ingenieros de hardware (por ejemplo, ingenieros mecánicos) que trabajan en los aspectos físicos del diseño del producto.
La dirección ejecutiva puede participar en la dirección general, el apoyo y los recursos para el desarrollo de productos.
Los especialistas en adquisiciones y el equipo de finanzas pueden colaborar con el equipo de ingeniería de productos. Estos especialistas ayudan a garantizar que se utilicen materiales de la más alta calidad en el proceso de desarrollo del producto y que esos materiales cumplan con el presupuesto del proyecto.
Según el producto, es posible que se necesite un asesor legal o especialistas en cumplimiento para garantizar que el producto cumple con las leyes y reglamentos pertinentes.
Los jefes de producto son responsables de definir la hoja de ruta de la organización y la estrategia de producto.
Aunque no existe una única hoja de ruta de ingeniería de productos que se aplique a todas las organizaciones, hay algunos elementos centrales que suelen incluirse en un proceso ágil y sistemático.
Estas fases garantizan que un producto se diseñe y construya de forma inteligente teniendo en cuenta tanto los requisitos comerciales como el usuario final. Las pruebas, la iteración, la validación y el monitoreo continuo de los resultados garantizan que la innovación se equilibre con la viabilidad técnica y las consideraciones presupuestarias. Dada la complejidad del proceso de ingeniería de productos, algunas organizaciones pueden optar por contratar a una empresa externa con experiencia especializada en servicios de ingeniería de productos o gestión de proyectos para agilizar la empresa.
Al igual que con el diseño de productos, la ingeniería de productos comienza con una lluvia de ideas y la conceptualización de ideas de productos. Aunque los ingenieros no suelen realizar ellos mismos estudios de mercado, durante esta fase de desarrollo pueden trabajar para traducir conceptos abstractos como las necesidades del cliente en especificaciones tangibles del producto, teniendo en cuenta el papel del producto, la viabilidad técnica, el plazo de comercialización y otras exigencias externas. Esta fase también puede incluir la recopilación de datos detallados, la identificación de requisitos del sistema y el esquema de funcionalidades.
Una vez finalizada una idea, los ingenieros comienzan la fase de diseño en la que crean wireframes detallados, especificaciones, dibujos y modelos del producto. Esta fase puede incluir el uso de herramientas CAD (diseño asistido por ordenador) para desarrollar modelos bidimensionales y tridimensionales. Los ingenieros diseñan y construyen prototipos, que se construyen y prueban para validar el producto antes de que pase a la producción a gran escala. Se pueden construir múltiples prototipos para ayudar en los procesos difíciles de resolución de problemas. En ingeniería de software, los ingenieros pueden definir la arquitectura general del sistema del producto durante esta fase.
A medida que se diseña el producto, o poco después de que se apruebe el prototipo final, el equipo de diseño y el equipo de ingeniería colaboran con los especialistas en adquisiciones para planificar cómo se construirá el producto final. Durante este tiempo, los ingenieros toman decisiones cruciales sobre la selección de materiales y el proceso de fabricación. Teniendo en cuenta factores como el coste, la escalabilidad, la durabilidad y la sostenibilidad, los ingenieros y los miembros de su equipo hacen un plan detallado para la producción en masa.
A medida que la tecnología ha avanzado, se ha vuelto más común que los productos involucren una combinación de componentes de hardware y software. El producto final puede ser una pieza de software en sí misma o requerir un proceso de ingeniería de producto de software independiente para garantizar una integración perfecta con una pieza de hardware. Idealmente, la fase de diseño y creación de prototipos habría incluido planes para la integración de varias tecnologías para crear un producto cohesivo y funcional.
Durante la fase de prueba del producto, los ingenieros lo evalúan estrictamente para asegurarse de que cumple las especificaciones y requisitos predefinidos, lo que puede incluir pruebas de rendimiento, fiabilidad, seguridad, escalabilidad y usabilidad. Como parte del proceso de pruebas, se aplican medidas de aseguramiento de la calidad (QA) para garantizar que el producto pueda cumplir o superar las normas del sector y las expectativas de los consumidores. Los procesos de validación pueden incluir pruebas de automatización o de rendimiento, en función del producto diseñado.
En un flujo de trabajo ideal de ingeniería de productos, el desarrollo y las pruebas son un proceso continuo en lugar de un estado final. Durante la fase de diseño, es posible que los ingenieros hayan planificado futuras actualizaciones y mantenimiento. Las pruebas continuas y el monitoreo de las métricas clave son cruciales para garantizar que el producto funcione según lo previsto. Para algunas organizaciones, invertir en la iteración continua puede ser el curso de acción más apropiado después del lanzamiento del producto. Esto podría significar diseñar e implementar actualizaciones, recopilar y filtrar los comentarios de los usuarios o dedicar un equipo de ingeniería para monitorizar continuamente el rendimiento del producto.
- Ventaja competitiva: un proceso de ingeniería de productos sistematizado e informado puede provocar bienes o servicios que superen las expectativas de los clientes y crear una ventaja competitiva en el mercado.
- Rentabilidad: a través de una cuidadosa selección de materiales y procesos de fabricación, y la optimización de la arquitectura y el diseño del sistema, los ingenieros de productos pueden lograr la rentabilidad sin comprometer la calidad. Al identificar los problemas antes de que surjan y trabajar continuamente para mejorar el producto, los ingenieros pueden reducir los costes.
- Productos de alta calidad: los ingenieros de producto optimizan el diseño de un producto, centrándose en crear bienes de consumo eficientes con la mejor funcionalidad y rendimiento posibles. Esto da como resultado productos más duraderos y confiables con un alto grado de usabilidad.
- Aumento de la innovación: la ingeniería de productos facilita la innovación al fomentar soluciones creativas para los desafíos de diseño y fabricación, aplicando nuevas tecnologías, materiales y enfoques para el desarrollo de productos novedosos.
- Cumplimiento normativo: el proceso de ingeniería del producto garantiza que el producto final cumpla con todas las regulaciones, estándares y requisitos de seguridad relevantes.
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